Genial! ¡El trato excelente, las instalaciones maravillosas y el jardín espectacular! Me encantó descansar, comer y soñar en este lugar. ¡Hasta pronto! ¡No cambien nunca! 😊👍

El albergue es encantador, con una reforma realizada con mucho amor. Es confortable y está ubicado en la ruta del camino del norte. La limpieza es impecable y las instalaciones del hotel son excelentes. Además, el desayuno es delicioso y cuenta con una variedad de opciones. El personal es amable y servicial.

Na.

El albergue O Xistral es simplemente increíble. Las habitaciones son cómodas, el jardín es espectacular y la piscina es genial. Además, Ainhoa, la cocinera, prepara unas lentejas y tortilla que son para chuparse los dedos. El desayuno es variado y delicioso. Todo el personal es súper amable y te hacen sentir como en casa. No se puede pedir más en un albergue.

Me sentí muy seguro, no tengo ninguna pega.

El albergue O Xistral en Abadín fue una grata sorpresa durante nuestra estancia. El lugar es muy bonito y acogedor, con instalaciones bien cuidadas y reformadas con amor. El trato y atención del personal fue excelente, nos sentimos como en casa. Además, la ubicación en la ruta del Camino del Norte fue perfecta. Nos hubiera encantado quedarnos más tiempo para disfrutar del hermoso jardín y la piscina.

ruido

Una experiencia increíble! La limpieza del albergue es de otro nivel y la decoración rústica es alucinante. ¡La vegetación y la piscina en el jardín son geniales! Las camas son súper cómodas y los baños son amplios. El anfitrión nos ofreció una deliciosa cena sin coste alguno.

Me encantó este lugar. Los mejores aspectos fueron la limpieza impecable, la atención del personal y el delicioso desayuno. También me encantó el hermoso jardín y la piscina para relajarse. Todo fue perfecto.

Nada de nada.

Un remanso de paz con ambiente acogedor, habitaciones bien equipadas, baño espacioso, y un hermoso jardín con piscina. La cena casera y abundante, el desayuno variado. El anfitrión es amable y atento. Perfecto para descansar durante el camino.

Desde el momento en que llegué, fui recibido con amabilidad y calidez por parte de Jaime y Paula, quienes han creado un lugar excepcional para alojarse en el Camino del Norte. El albergue, una casa rural rehabilitada con esmero y buen gusto, cuenta con todas las comodidades que uno podría desear, desde calefacción hasta toallas y ropa de cama de calidad. Además, la cocina está totalmente equipada y el salón comedor es acogedor, especialmente con la estufa encendida en invierno. Los baños están en excelentes condiciones y cuentan con secador de pelo y una práctica barra para secar la ropa. Pero lo mejor de todo es el hermoso jardín con piscina, donde puedes relajarte y disfrutar de la tranquilidad del entorno. debo mencionar la cena comunitaria, que es deliciosa y abundante, y el desayuno variado y completo. En resumen, recomiendo encarecidamente Albergue o Xistral para cualquier peregrino o viajero que busque un lugar acogedor y lleno de detalles especiales.

Que no pude quedarme más tiempo 😔

Desde que llegamos, nos sorprendió la belleza de la casa antigua de piedra y la atención de Jaime. Las habitaciones eran cómodas, con camas de madera y baños modernos. El jardín con la piscina fue un lugar perfecto para relajarse. La cena vegetariana que nos ofrecieron fue deliciosa y el desayuno variado. La limpieza del albergue era impecable. Aunque encontramos algunos pequeños inconvenientes, como la luz de la luna que entraba en la habitación o el ruido del suelo, en general, nuestra experiencia fue increíble. Recomendaría este albergue sin duda.

• Encantadora anfitriona con deliciosas comidas. • Habitaciones cómodas y bien decoradas. • Precioso jardín con piscina. • Cena comunitaria para conocer gente. • Atención amable y atenta. • Desayuno variado y abundante. • Baños modernos y espaciosos. • Ambiente tranquilo y acogedor.

Imposible encontrar algo.

Mi estancia en Albergue O Xistral en Abadin fue simplemente maravillosa. El ambiente tranquilo y acogedor de este albergue rural fue un bálsamo para mi cansancio en el Camino de Santiago. La casa de piedra restaurada con detalles encantadores y el cuidado jardín con piscina fueron un verdadero placer. Las camas cómodas y el moderno baño espacioso también fueron un punto a favor. Además, la cena vegetariana casera y abundante fue deliciosa. Jaime, el amable anfitrión, hizo que mi estancia fuera aún más agradable con su amabilidad y atención. Hubiera deseado quedarme más tiempo para disfrutar de este remanso de paz antes de continuar con mi camino. También me gustaría destacar la ubicación del albergue en el Camino y la excelente atención que recibí de Jaime.

Hubo un par de pequeñas molestias durante mi estancia. En la habitación en la que me quedé, la luz de la luna entraba y molestaba a uno de los huéspedes.

Mi estancia en este albergue fue una experiencia maravillosa. Es un remanso de paz en el camino, ideal para descansar. El albergue está ubicado en una antigua casa de piedra rehabilitada con mucho cariño y buen gusto. Las habitaciones son cómodas, con literas de madera y buenos colchones. El baño es espacioso y moderno, con una ducha increíble. El salón común es luminoso y acogedor. El jardín es un verdadero espectáculo, con piscina, césped, árboles, hamacas y tumbonas. Además, Jaime, el anfitrión, es encantador y atento. La cena casera vegetariana que ofrecen es deliciosa y el desayuno muy completo. Sin duda, recomendaría este albergue para una estancia única en el Camino del Norte.

No hay nada en absoluto de lo que quejarse 😊

El albergue está situado en un entorno tranquilo y bonito, con un jardín amplio y una piscina para relajarse. Las habitaciones son cómodas, con camas con sábanas de algodón y baños modernos. El servicio es amable y atento, ofreciendo comidas caseras y opciones vegetarianas. Además, hay una cocina donde los huéspedes pueden disfrutar de bebidas y comida, y pagar al final. El desayuno es variado y abundante, con opciones saladas y dulces para todos los gustos.

La ubicación puede ser algo difícil de encontrar sin GPS, pero esto es más bien un fallo de planificación personal que un defecto del alojamiento en sí.

Me encantó este lugar. El albergue es muy bonito, con habitaciones cómodas y un baño amplio. El jardín es espectacular, con una piscina perfecta para relajarse. El desayuno estaba delicioso y el personal fue muy amable.

Me encantó mi estancia en este albergue durante el Año Nuevo. Lo que más me gustó fue la amabilidad del personal y la atención que brindaron. Además, el albergue está ubicado en un lugar estratégico, cerca del Camino del Norte, lo cual fue conveniente para mí como peregrino. Otro aspecto destacado fue la cena comunitaria, donde pude compartir con otros huéspedes y disfrutar de deliciosos platos caseros. Además, las instalaciones eran cómodas y acogedoras, incluyendo el jardín con tumbonas y la piscina. Fue un lugar perfecto para relajarme y descansar después de un largo día de caminata.

En cuanto a las cosas que no me gustaron tanto, mencionaría que la ubicación del albergue puede ser un poco alejada de otros servicios o lugares de interés. Sin embargo, esto no fue un problema para mí, ya que estaba buscando un lugar tranquilo para descansar.